El trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) es una condición neurobiológica que afecta a millones de personas en todo el mundo, caracterizada por dificultades en la atención, la hiperactividad y la impulsividad. El tratamiento convencional del TDAH a menudo implica el uso de medicamentos estimulantes, como el metilfenidato o el dextroanfetamina, para mejorar la concentración y el control de los síntomas. Sin embargo, para aquellos que buscan alternativas no farmacológicas, los dispositivos de avance mandibular (DAM) pueden ofrecer una solución prometedora.
Los DAM son dispositivos diseñados originalmente para tratar la apnea obstructiva del sueño (AOS) al avanzar la mandíbula durante el sueño para mantener las vías respiratorias abiertas. Aunque su principal función es tratar la AOS, algunos estudios han explorado su potencial para mejorar la concentración y la atención. Una de las teorías detrás de esta conexión es que los problemas de sueño, como la fragmentación del sueño y la falta de sueño profundo, pueden exacerbar los síntomas del TDAH, y al tratar eficazmente la AOS con DAM, se puede mejorar la calidad del sueño y, en consecuencia, la concentración durante el día.
La calidad del sueño juega un papel crucial en la función cognitiva y el rendimiento mental. La falta de sueño reparador puede afectar negativamente la atención, la concentración y la memoria, lo que puede agravar los síntomas del TDAH. Al mejorar la calidad del sueño y reducir los despertares nocturnos, los DAM pueden ayudar a promover un sueño más profundo y reparador, lo que a su vez puede conducir a una mejora en la concentración y la atención durante el día.
Además de mejorar la calidad del sueño, estos dispositivos también pueden tener efectos positivos en la salud bucal y la postura, lo que puede influir indirectamente en la concentración y la atención en personas con TDAH. Al corregir problemas como el bruxismo (rechinar de los dientes) y la apertura excesiva de la boca durante el sueño, pueden ayudar a reducir la tensión muscular y mejorar la alineación de la mandíbula y la columna vertebral, lo que puede tener beneficios adicionales en la función cognitiva y el bienestar general.
Es importante tener en cuenta que los DAM no son una solución única para el TDAH y que deben utilizarse como parte de un enfoque integral que incluya terapia conductual, modificación del estilo de vida y otras intervenciones según sea necesario. Además, se necesita más investigación para comprender completamente el papel de los DAM en el tratamiento y determinar qué subgrupos de pacientes pueden beneficiarse más de su uso.