Descansar adecuadamente es tan importante para la salud como una buena alimentación o realizar ejercicio. Si bien cada persona requiere mayor o menor cuidado en cualquiera de estos aspectos, sí es importante remarcar que sin la cantidad adecuada de horas de descanso el cuerpo comenzará verse afectado en distintos niveles. Mientras mayor sea la falta de sueño, peor.
Entre los efectos más comunes, sin la cantidad apropiada de sueño se reduce la capacidad para concentrarse, razonar y participar en las actividades diarias, además de ver aumentada la irritabilidad. Pero cuando el cuerpo comienza a descansar acumulativamente mucho menos o a dormir muy pocas horas diarias (alcanzando pocas veces el estado REM), los efectos pueden ser tan devastadores que pueden derivar en episodios depresivos o desencadenar otras enfermedades, como diabetes, hipertensión, cardiopatías, entre otras.
¿Pero por qué la falta de sueño puede generar tantos problemas de salud? En esencia es porque durante el descanso nocturno, especialmente durante la fase REM, el cuerpo lleva a cabo una serie de procesos regenerativos que son vitales para que los órganos del cuerpo funcionen correctamente. Si al cuerpo se le restringen los espacios de regeneración estará más débil y con menos defensas para combatir enfermedades.
Por ello, la recomendación desde Clínica Somno es “tratar de dormir siempre un promedio de 7 u ocho horas y mantener una higiene del sueño saludable, que implique tomar conciencia de la necesidad de dejar de lado las pantallas del teléfono y televisión al acostarse, no alimentarse demasiado tarde ni comer pesado para no interrumpir el proceso de descanso con el de digestión, entre otros detalles que permitirán al cuerpo conciliar más fácilmente el sueño”.
Fase 1 🡪 NREM: Dura pocos minutos y es la etapa más ligera. En este período la actividad fisiológica disminuye y la persona se despierta fácilmente con estímulos sensoriales, como el ruido.
Fase 2 🡪 NREM: Dura de 10 a 20 minutos y es un período de sueño levemente más profundo. La relajación es progresiva, las funciones corporales continúan enlenteciendo y la persona puede seguir despertando con relativa facilidad.
Fase 3 🡪 NREM: Dura de 15 a 30 minutos e implica las etapas iniciales del sueño profundo. Los músculos están completamente relajados y ya es algo más difícil que la persona se despierte.
Fase 4 🡪 NREM: Dura de 15 a 30 minutos y es una etapa de sueño levemente más profundo. Si hay falta de sueño, esta etapa ocupará gran parte de la noche. Aquí puede aparecer sonambulismo y enuresis (mojar la cama) y es bastante difícil despertar.
Fase 5 🡪 REM: Empieza aproximadamente 90 minutos después de haberse quedado dormido. Su duración aumenta en cada ciclo y tiene una media de 20 minutos. Es durante esta etapa donde podemos tener sueños vívidos y se caracteriza por el movimiento rápido de los ojos, frecuencias cardiacas y respiratorias fluctuantes, aumento y fluctuación de la presión arterial, pérdida de tono del músculo esquelético y el incremento de las secreciones gástricas. Durante este período es muy difícil despertar a la persona y es donde el cuerpo lleva adelante su descanso y regeneración más profundos.
Artículo elaborado para prensa el 16/02/2023