El insomnio, un trastorno del sueño común, plantea desafíos significativos para la productividad laboral según varios estudios realizados en Chile. Investigaciones recientes llevadas a cabo por la Universidad de Chile han revelado que este trastorno afecta no solo la calidad del sueño, sino también la capacidad de los trabajadores para desempeñarse de manera óptima en el trabajo. Estos estudios han encontrado una asociación directa entre la falta de sueño adecuado y una disminución en la productividad laboral.
Además, un estudio publicado en la Revista Médica de Chile encontró que los trabajadores que experimentan insomnio tienen más probabilidades de cometer errores en el trabajo en comparación con aquellos que duermen bien. La falta de sueño puede afectar la función cognitiva y la capacidad de concentración, lo que puede llevar a una mayor incidencia de errores en tareas laborales cotidianas.
Otro aspecto importante que destacan estos estudios es cómo este trastorno puede afectar el bienestar emocional de los trabajadores. La falta de sueño adecuado puede aumentar el riesgo de desarrollar problemas de salud mental, como la ansiedad y la depresión, que a su vez pueden afectar la motivación y la satisfacción en el trabajo. Esta conexión entre el insomnio y la salud mental puede tener un impacto negativo en la productividad laboral a largo plazo.
Por último, el insomnio también puede tener consecuencias económicas significativas para las empresas. Un estudio realizado por la Pontificia Universidad Católica de Chile estimó que el insomnio puede resultar en costos adicionales para las empresas debido a errores en el trabajo, ausentismo laboral y pérdida de productividad. Estos costos pueden afectar la rentabilidad y el éxito a largo plazo de la empresa.