Publicado en La FM.

A medida que pasan los años, las personas van perdiendo la capacidad de dormir profundamente.

Durante la adolescencia los seres humanos sienten que duermen largo y profundo en su hora de descanso, pero con el pasar del tiempo conciliar el sueño se vuelve todo un reto.

La falta de sueño hasta el momento no se ha considerado un problema patológico. Estudios han demostrado que se trata de una evolución natural del ser humano con respecto a las diferentes etapas de la vida.

Pedro Moya, neurólogo de la Clínica Somno de Chile, explicó: “Cuando vamos cumpliendo años, nuestro ritmo circadiano se adelanta y sentimos el sueño antes, eso hace que tendamos a madrugar más.

Así también, el porcentaje de sueño nocturno desciende, dormimos menos durante la noche y realizamos pequeñas siestas a lo largo del día”.

Así las cosas, todo parece indicar que con el pasar del tiempo la arquitectura del sueño sufre grandes alteraciones y modificaciones.

El sueño profundo cambia secuencialmente, “Este cambio en el sueño, se debe a una modificación en el sueño no REM (que es cuando no soñamos). Lo que ocurre es una disminución significativa del sueño profundo”, manifiesta el neurólogo.

Los especialistas en el tema recomiendan una serie de conductas que permitirán conciliar fácilmente el sueño y evitar que se interrumpa durante su descanso profundo. Consejos para conciliar el sueño y tener un buen descanso:

Evitar por completo las bebidas que contengan cafeína o energizantes

Levantarse todas las mañanas a la misma hora sin importar que esté en vacaciones o que sea fin de semana

Comer dos horas antes de ir a la cama para evitar que su metabolismo no le permita descansar

Evitar tomar bebidas antes de acostarse, pues levantarse al baño a media noche le impedirá continuar con un sueño profundo

No dormir siestas de más de 20 minutos

Evitar descansar con dispositivos electrónicos muy cerca a usted como los computadores, celulares, y televisores.